¿Y tu, cuántas veces al día revisas o publicas contenido en tus redes sociales?
Desde hace algunos años nuestra vida comenzó a girar en torno al internet, un medio de comunicación que nos acerca de extremo a extremo del planeta en tan solo unos segundos. Gracias al internet, el uso de redes sociales ha tomado un papel especial en nuestra vida diaria: Facebook, Twitter, Instagram, Spotify, LinkedIn y miles de programas y aplicaciones más que se suman a la lista, pero ¿nos hemos puesto a pensar, qué impacto tiene todo lo que compartimos en el manejo de nuestra imagen? ¿es la imagen que proyectamos en nuestras redes sociales la que realmente queremos mostrar en la vida real?
El contenido que generamos en nuestras redes sociales tiene mucho que decir de nosotros ya que sin querer todo el contenido que compartimos nos beneficia o perjudica al momento de construir nuestra imagen. Algunas recomendaciones para tener una imagen “cool” en nuestras redes sociales de la misma forma que nos esforzamos para tenerla en la vida real son los siguientes:
- Fotos de baja calidad
A veces es fácil para nosotros tener una foto de perfil perfectamente editada mientras que las demás fotos son de baja calidad y se ven mal, recordemos que nosotros también somos una “marca”, así como la marca Coca Cola, también las personas podemos con ayuda de nuestra imagen construir una marca, tal como lo hace Cristiano Ronaldo o Jennifer López.
- Redes sociales personales VS redes sociales de trabajo
Si no podemos evitar subir memes o cualquier contenido que pueda revelar nuestra más íntima personalidad, sí podemos abrir una cuenta laboral para segmentar a nuestros contactos formales de los personales o sociales, esto nos ayudará mucho a separar la vida profesional de la personal. Actualmente, Facebook, Finkedin o Whatsapp son herramientas muy eficaces que se utilizan también para el trabajo y podemos perder una oportunidad laboral importante por mostrarnos infantiles o inmaduros con nuestras publicaciones.
- Cuidado con las etiquetas
Ciertamente no podemos cuidar todo el tiempo lo que suben nuestros amigos o conocidos de nosotros, pero si podemos cuidar la privacidad de las fotos o comentarios en las que nos etiquetan, ojo, ¡nadie necesita ver esa foto donde se te pasaron las copas por andar muy feliz aquella noche!; basta con configurar nuestras etiquetas para que solo nuestro círculo social de más confianza pueda verlo.
- Posts demasiado expresivos
Sabemos que son muy felices con su nuevo bebé, que están muy enamorados o muy tristes porque su última relación no funcionó como debería, pero este tipo de publicaciones constantes pueden llegar a ser negativas si se hacen con mucha frecuencia; también hay que cuidar este tipo de posts para que no afecte nuestra imagen virtual y hartemos a nuestros amigos o seguidores.
- Lenguaje escrito
¡Cuidado con la ortografía! No hay algo peor que dañe nuestra imagen virtual que las faltas de ortografía, hoy en día el auto corrector es de gran ayuda al momento de escribir, nunca está de más revisar comas, puntos y acentos antes de publicar. Si posteamos con faltas de ortografía nuestra imagen será la de una persona que lee poco y que no se sabe expresar.
Así que la próxima vez que estemos a punto de compartir una foto de baja calidad, o escribir con faltas de ortografía por “moda” pensemos dos veces y recordemos que nuestra red de amigos en un futuro se puede convertir en una red de trabajo importante, no pasemos por alto que nuestra imagen virtual es en pleno 2018, una extensión de nuestra imagen real y puede sumar o restar muchos puntos a nuestra personalidad.
Lic. Maricarmen Gutierrez
Profesora del Instituto Tecnológico Particular Leona Vicario